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Bacalao, perejil, jitomate, ajo, papa cambray, pimiento, cebolla, alcaparras, aceituna verde, almendras y chiles güeros.

El bacalao a la vizcaína,  llegó a la Nueva España en el siglo XVI junto con la religión católica y las costumbres de Cuaresma y Pascua, en las cuales se acostumbra a preparar platillos sin carne roja y, en cambio, en los menús es sustituida por pescado.

El ingrediente principal es el bacalao, un pez que vive en aguas frías y puede pesar entre 50 y 200 kilogramos. Los que provienen de la región noruega son considerados los de mejor calidad porque tienen una carne más firme y tienen un sabor más delicado.

La historia cuenta que en 1835, Simón Gurtubay Zubero, hombre de negocios vizcaíno dedicado al comercio de pieles y, posteriormente, a la importación del bacalao, envió un telegrama a sus proveedores habituales solicitando 100 o 120 bacalaos. Debido a una confusión entre el número “0″ y la letra “o” recibió 1,000,120 filetes en el puerto de Bilbao. Por lo tanto, recurrió al método de la salazón para conservarlos. Coincidió que durante este periodo se llevaba a cabo la Primera Guerra Carlista, por tanto, la gran cantidad de bacalao con la que contaba Gurtubay Zubero fue la base de alimentación de los vizcaínos.

Bacalao a la Vizcaína

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El bacalao a la vizcaína,  llegó a la Nueva España en el siglo XVI junto con la religión católica y las costumbres de Cuaresma y Pascua, en las cuales se acostumbra a preparar platillos sin carne roja y, en cambio, en los menús es sustituida por pescado.

El ingrediente principal es el bacalao, un pez que vive en aguas frías y puede pesar entre 50 y 200 kilogramos. Los que provienen de la región noruega son considerados los de mejor calidad porque tienen una carne más firme y tienen un sabor más delicado.

La historia cuenta que en 1835, Simón Gurtubay Zubero, hombre de negocios vizcaíno dedicado al comercio de pieles y, posteriormente, a la importación del bacalao, envió un telegrama a sus proveedores habituales solicitando 100 o 120 bacalaos. Debido a una confusión entre el número “0″ y la letra “o” recibió 1,000,120 filetes en el puerto de Bilbao. Por lo tanto, recurrió al método de la salazón para conservarlos. Coincidió que durante este periodo se llevaba a cabo la Primera Guerra Carlista, por tanto, la gran cantidad de bacalao con la que contaba Gurtubay Zubero fue la base de alimentación de los vizcaínos.